
El Monasterio de Santa Fe, situado junto a Cadrete en el término municipal de Zaragoza, fue construido en 1341 a raíz del traslado de los monjes del monasterio de Fonclara, en el valle del Cinca, fundado por Jaime I en 1223.
Posteriormente, fue reedificado en el siglo XVIII marcándose su estilo barroco. Las obras concluyeron en el año 1797, como puede leerse en el acceso al recinto monástico. En 1808, durante el primer Sitio de Zaragoza, las tropas francesas saquearon el monasterio, causando graves destrozos y expoliaron objetos de gran valor. Por suerte, se conservaron algunas de las estatuas que rodean la cúpula y que representan a los Padres de la Iglesia.
En 1820, con el primer intento desamortizador, la mayor parte de las tierras y propiedades del monasterio se vendieron. Aunque en 1823 fueron restituidas a los monjes, la orden definitiva de abandono del claustro les llegó a los religiosos en 1835 con la desamortización de Mendizábal. Tierras y propiedades volvieron a sus antiguos compradores y otros nuevos adquirieron las edificaciones monásticas. A partir de entonces, el monasterio fue pasando de mano en mano y su conservación fue descuidada.
En el video de más abajo pueden ver , a vista de pájaro, el estado de dicho Monasterio hace unos pocos años. Una joya que habría que recuperar